Una mirada científica al papel del orégano en el bienestar
Muchos conocen bien el orégano y su capacidad para transformar platos comunes en deliciosas obras maestras. Esta hierba mediterránea, de la familia de las Lamiaceae, ofrece mucho más que un atractivo culinario. Investigaciones científicas revelan que sus beneficios se extienden profundamente a la salud humana, apoyando desde la función inmunológica hasta la salud cardíaca. Estudios modernos validan lo que los antiguos curanderos sabían hace siglos sobre las propiedades terapéuticas de esta poderosa planta.
La hierba contiene potentes compuestos bioactivos, en particular carvacrol y timol, que impulsan la mayoría de los beneficios del orégano. Estos químicos naturales poseen potentes propiedades antimicrobianas, antioxidantes y antiinflamatorias, confirmadas en estudios de laboratorio. Tanto en forma fresca, seca como en aceite, pueden proporcionar beneficios para la salud al incorporarse a su consumo diario o al tomarse con fines terapéuticos.
1. Potentes propiedades antioxidantes que combaten los radicales libres.
2. Efectos antibacterianos: combaten microorganismos dañinos.