
La evidencia científica respalda que los beneficios del orégano incluyen potentes propiedades antibacterianas contra numerosos organismos patógenos. Estudios de laboratorio demuestran que el aceite de orégano previene eficazmente el crecimiento de bacterias peligrosas, como E. coli y Pseudomonas aeruginosa. Esta hierba es especialmente prometedora contra cepas bacterianas multirresistentes que no responden positivamente a los tratamientos actuales. Las investigaciones revelan que el aceite de orégano destruye las biopelículas bacterianas, barreras protectoras que dificultan el tratamiento de las infecciones. Para los investigadores, esto demuestra la capacidad del orégano para reforzar las defensas naturales del cuerpo contra las infecciones bacterianas.
3. Sus propiedades antiinflamatorias reducen la inflamación crónica.

Los beneficios del orégano se extienden al control de la inflamación. El contenido de carvacrol de esta hierba ha demostrado importantes efectos antiinflamatorios en estudios con animales, reduciendo la hinchazón hasta en un 57 % en estudios de laboratorio. La inflamación crónica está relacionada con el desarrollo de enfermedades cardíacas, diabetes y trastornos autoinmunes, lo que hace que las propiedades antiinflamatorias del orégano sean particularmente valiosas. Las combinaciones de aceites esenciales que contienen orégano reducen los marcadores inflamatorios en afecciones del tracto digestivo como la colitis. Sin embargo, los estudios en humanos con dosis dietéticas típicas siguen siendo limitados, por lo que se requieren más investigaciones para confirmar los beneficios del orégano.
4. La actividad antiviral refuerza la defensa inmunitaria.

El carvacrol y el timol, principales compuestos activos del orégano, demuestran propiedades antivirales contra diversos patógenos, como el norovirus y el virus del herpes simple. Estudios de laboratorio muestran que estos compuestos inactivan el 90 % de las partículas del virus del herpes en una hora tras la exposición. Los efectos antivirales del orégano pueden reforzar el sistema inmunitario durante las temporadas de resfriados y gripe. Si bien son prometedores, la evidencia actual proviene principalmente de estudios de laboratorio, y los ensayos en humanos aún no confirman los beneficios del orégano.
5. Compuestos anticancerígenos prometedores

Algunos estudios in vitro en probeta han demostrado que el extracto de orégano detiene el crecimiento de células cancerosas de colon y las destruye. El alto contenido de antioxidantes de la hierba puede prevenir el daño al ADN que provoca daño celular. El carvacrol se muestra prometedor específicamente contra varios tipos de cáncer, como el de ovario, próstata y leucemia, en estudios de probeta. Investigaciones en animales indican que la suplementación con orégano puede frenar el crecimiento tumoral y la metástasis. Sin embargo, estos beneficios del orégano requieren validación mediante ensayos clínicos en humanos antes de su uso como terapias clínicas.
6. Apoyo a la salud cardíaca

La hierba ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL “malo” a la vez que favorece la salud cardíaca general gracias a sus potentes compuestos antioxidantes. El consumo regular de orégano puede prevenir el desarrollo de enfermedades cardíacas al proteger los vasos sanguíneos del daño oxidativo. Los flavonoides, el timol y el carvacrol del orégano trabajan juntos para mejorar los perfiles lipídicos y reducir los factores de riesgo cardíaco. La hierba muestra beneficios para la salud cardíaca y el sistema nervioso en estudios preliminares, aunque la investigación en humanos sigue siendo limitada. Estos beneficios del orégano sugieren un potencial para el apoyo natural a la salud cardíaca cuando se combina con opciones de estilo de vida saludables.