El flan de leche condensada se ha adaptado en distintos países con variaciones únicas:
México: suele incluir queso crema, lo que le da una textura más densa.
España: se prepara de forma más ligera, con leche entera y menos dulce.
Cuba: el flan de leche condensada es un clásico en las celebraciones familiares.
Filipinas: se conoce como leche flan y suele cocinarse al vapor.
¿Por qué el flan de leche condensada nunca pasa de moda?
La respuesta es sencilla: combina sencillez, tradición y sabor. Es un postre que se adapta a todas las generaciones y que se disfruta en cualquier lugar del mundo. Además, su preparación no requiere técnicas complejas, lo que lo convierte en una receta accesible para todos.
Conclusión: un postre para compartir y disfrutar
El flan de leche condensada no es solo un postre, es una tradición que reúne a la familia alrededor de la mesa. Prepararlo en casa es una experiencia gratificante que permite crear momentos especiales. Con esta receta, sus variaciones y consejos, tendrás todas las herramientas para convertirte en un experto en flanes.